Sandy cruza las Bahamas,
deja lluvias en Florida y amenaza al este de EEUU
El huracán
"Sandy", el décimo de una temporada inusualmente activa en la cuenca
atlántica, avanza hacia el norte por el sur de Bahamas y su amplio radio hace
que también se esté viendo afectada la costa este de Florida, aunque la mayor
preocupación empieza a ser el noreste de Estados Unidos.
Después de haber
atravesado Jamaica y Cuba, este huracán de categoría dos sobre un máximo de
cinco en la escala de Saffir-Simpson se adentró hoy en el sureste de las
turísticas islas Bahamas y se espera que durante todo el día, así como el
viernes, recorra de sur a norte ese archipiélago.
Allí, colegios públicos,
edificios oficiales y aeropuertos permanecen cerrados, y negocios y tiendas
particulares también han optado por no abrir hoy sus puertas después de que las
autoridades locales ordenaran ultimar los preparativos para hacer frente a este
huracán.
"La gran preocupación
son las inundaciones. Los daños de los vientos y los cortes eléctricos son
otras amenazas. Primero llegan las fuertes lluvias, luego los vientos y los
árboles se derriban", explicó gráficamente el meteorólogo de AccuWeather.com
Steve Travis.
El diario local The Guardian
Nassau detalla en su edición digital que el primer ministro de Bahamas, Perry
Christie, ha urgido a todos los residentes a que extremen la precaución y ha
informado de que muchos aeropuertos y puertos del archipiélago permanecerán
cerrados también el viernes.
"A los negocios,
incluidos los bancos, también se les ha pedido que permanezcan cerrados el
jueves y el viernes", dijo Christie, quien aseguró que su Gobierno está
"preparado para atender a los habitantes" que lo necesiten.
Los vientos máximos
sostenidos de "Sandy" son de 165 kilómetros por hora, con rachas
superiores, según el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de EE.UU., y su centro
se desplaza hacia el norte con gran rapidez: a unos 32 kilómetros por hora.
El CNH prevé que este
huracán siga avanzando hacia el norte hasta hoy por la noche, cuando podría
girar hacia el nor-noroeste y reducir ligeramente su velocidad de
desplazamiento.
Aunque se prevé también un
cierto debilitamiento en las próximas horas, el CNH advierte de que seguramente
se mantendrá como huracán mientras atraviesa las Bahamas.
Los vientos huracanados se
dejan notar a unos 45 kilómetros del ojo del huracán, mientras que las
condiciones equivalentes a una tormenta tropical se extienden a unos 335
kilómetros del centro.
Dado ese amplio radio del
huracán, la costa este de Florida también está en alerta y el sur sufre desde
esta mañana intensas lluvias, rachas de viento, cortes puntuales del suministro
eléctrico, inundaciones aisladas e intensa marejada.
En gran parte de la costa
este de Florida se han cancelado las clases del viernes, se ha pedido a los
dueños de embarcaciones de recreo que se abstengan de salir al mar y los
grandes barcos cruceros que tienen aquí su puerto de salida y llegada observan
con atención la evolución del temporal.
Sin embargo, lo que más
preocupa en EE.UU. no es ya Florida, sino los estados del norte de la costa
este, ya que los meteorólogos prevén que una vez que el frente supere las
Bahamas continúe su potente desplazamiento hacia el norte, con lo que podría
tocar tierra, en forma de tormenta tropical, en algún punto de los estados de
Nueva Jersey, Nueva York, Connecticut, Rhode Island o Maine, entre otros.
Estos estados están menos
habituados a lidiar con estos fenómenos y a ello se suma que, cuando el frente
llegue a esa zona en torno al próximo martes, podría coincidir con una tormenta
de inverno, lo que podría complicar la situación meteorológica, según alertaba
hoy The Weather Channel.
Mientras tanto, este amplio
frente aún está dejando intensas lluvias también en Haití, donde al menos tres
personas han muerto, se han registrado importantes daños y cientos de personas
han sido evacuadas, así como en República Dominicana.
En ese país un total de
8.755 personas se ha visto obligada a abandonar sus casas y 77 localidades, la
mayoría en la provincia de Azua (suroeste), están incomunicadas por la crecida
de ríos causada por "Sandy", según el Centro de Operaciones de
Emergencia de República Dominicana.
En Cuba, la ciudad de
Santiago fue una de las zona más castigadas por el paso "Sandy", con
derrumbes de viviendas, derribo de cientos de árboles y cortes en el suministro
eléctrico.
Previamente el huracán pasó
por Jamaica, donde causó la muerte de al menos una persona y dejó a más de
medio país sin luz.