
Por Miguel Hernandez
Maimon Provincia
Monseñor Nouel - Fuerte Protesta se mantiene en maimón bloqueado la carretera que comunica Maimón – Cotuí,en demanda de que la empresa minera Barrick cumpla con las
comunidades y los campesinos del llagar, ya que los desalojos
del antiguo llagar están sin soluciones y los acuerdos que se
obtuvieron han sido burlado alejan los comunitarios .
Luego de la
primera protesta que los campesinos pusieran en marcha el pasado 6 de diciembre del 2011 para exigir a la
Barrick Pueblo Viejo que entregue las tierras que supuestamente prometió,
provocó una reunión con los demandantes, donde la empresa minera aclaro, que es
el gobierno quien tiene la responsabilidad de cumplir con esos acuerdos y demandas señala la
empresa.
La empresa minera explicó que realizó un avance al estado dominicano atreves
de la Rosario Dominicana para que cumpliera con los acuerdo de desalojo y desde
ese entonces se han producido una serie de reuniones para llegar a una solución
pacífica, pero aun no hay ninguna solución a las demandas de esta personas y las
comunidades.
Los campesinos valiéndose
del único mecanismo que posee este miércoles impediron el tránsito hacia la
empresa minera, creando desesperación y presión para que el gobierno en nombre del
director de minería Octavio López le cumpla lo acordado creando una gran confusión en la población el
transito los trabajadores que se desplazaban a laborar en la Barrick Gold
Sostuvieron
los campesinos que la empresa minera tiene algún grado de responsabilidad de su
desalojo y por lo tanto se le impide que realice sus operaciones hasta que
estos no ayuden a buscar una salida que ellos puedan recuperar sus casas y
tierras perdida.
La policía mantiene
fuerte patrullajes en todas las vías desde las comunidades de piedra
blanca,hoja ancha,tocoa, la cuaba ,maimon , entrada de los martines y la
carretera principal de maimon cotui
donde operan las intalaciones de la Barrick
Gold para evitar enfrentamientos y daños
a las propiedades dijo el
coronel de la dotación policial de
Monseñor Nouel Miguel Suriel