Una comisión de los Derechos Humanos sin Rostro, denunció este jueves los acosos a que están siendo sometidos jóvenes de barrios y comunidades de esta ciudad.
Eugenio Torres, presidente y vocero de la entidad, declaró este municipio en estado de emergencia por los casos arbitrarios en que agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) les ponen drogas a la juventud para culparlos de posesión.
Calificó de alarmantes los casos registrados durante los últimos días. Responsabilizó a un capitán de apellido Suárez de las acciones emprendidas.
Formuló un llamado al presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), a fin de que investigue y detenga los atropellos contra la juventud de esta población.
Exigió el traslado completo de la dotación de la DNCD en Bonao. “Ya la juventud no quiere salir a trabajar o recrearse, porque la DNCD realiza operativos arbitrarios con el propósito de pescar en río revuelto”.
El representante de la entidad, dijo no oponerse a que la DNCD realice un trabajo apegado a las leyes dominicanas, “pero no poniendo drogas a jóvenes para culparlos de posesión y luego ponerlos en libertad a cambio de dinero”.
Apuntó que a los jóvenes fichados por drogas de manera injusta, lo están matando en vida, al afirmar que se les dificulta encontrar trabajo o buscar visa para viajar al exterior.
Torres ofreció sus declaraciones en la misma sede del Comando Regional Cibao Sur de la Policía donde opera el organismo antinarcótico.
Por Tony Balbuena