Vaticano acusado
de violar los derechos del niño
GINEBRA, 05 Feb 2014 (AFP) – La ONU acusó este miércoles
al Vaticano de violar la Convención de Derechos del Niño, tras publicar un
informe muy crítico en el que le exige que denuncie a la policía a todos los
pedófilos. En las conclusiones de un informe, el comité urge a la Santa Sede a
“apartar de inmediato de sus funciones a todos los autores conocidos y
sospechosos de abusos sexuales a niños, y denunciarlos a las autoridades
competentes para que los investiguen y procesen”.
El informe ha sido publicado tras una audiencia celebrada
el pasado mes en Ginebra, en la que miembros del comité, compuesto por 18
expertos en derechos humanos de todo el mundo, interrogaron a una delegación
del Vaticano sobre su política de lucha contra la pedofilia. Al preguntársele
si el informe acusa al Vaticano de violar la Convención de Derechos del Niño de
la ONU en lo que respecta a abusos sexuales, la presidenta del comité, Kirsten
Sandberg, respondió: “La respuesta es sí, hasta ahora han violado la
Convención, porque no han hecho todo lo que deberían” para atajar este
problema.
En el informe, el comité afirma que la Iglesia Católica
no ha hecho aún lo suficiente para cumplir su compromiso de erradicar la
pedofilia. El comité de la ONU destaca “su profunda inquietud por los abusos
sexuales cometidos contra niños por miembros de iglesias católicas que operan
bajo la autoridad de la Santa Sede”, y recordó que estos crímenes cometidos por
religiosos conciernen a “decenas de miles de niños de todo el mundo”.
“El Comité está muy preocupado de que la Santa Sede no
haya reconocido la amplitud de los crímenes cometidos, no haya tomado las
medidas apropiadas para afrontar los casos de pedofilia y para proteger a los
niños y haya adoptado políticas y prácticas que han propiciado la continuación
de los abusos y la impunidad de los autores”, añade el texto.
“Movilidad de los
criminales”
El informe critica en particular la política de mutar de parroquia a los sacerdotes pedófilos, una práctica que considera como un intento de encubrir los crímenes y evitar que sean juzgados por las autoridades civiles. “La práctica de la movilidad de los criminales, que ha permitido a muchos sacerdotes permanecer en contacto con niños y seguir abusando de ellos, continúa exponiendo a niños de numerosos países a un alto riesgo de sufrir abusos sexuales”, escribe el informe. Al igual que otros firmantes de la Convención de la ONU de los Derechos del Niño en 1989, el Vaticano está sometido a la vigilancia del comité.
El informe critica en particular la política de mutar de parroquia a los sacerdotes pedófilos, una práctica que considera como un intento de encubrir los crímenes y evitar que sean juzgados por las autoridades civiles. “La práctica de la movilidad de los criminales, que ha permitido a muchos sacerdotes permanecer en contacto con niños y seguir abusando de ellos, continúa exponiendo a niños de numerosos países a un alto riesgo de sufrir abusos sexuales”, escribe el informe. Al igual que otros firmantes de la Convención de la ONU de los Derechos del Niño en 1989, el Vaticano está sometido a la vigilancia del comité.
La del pasado mes fue la primera comparecencia desde que
estalló el escándalo de abusos sexuales en numerosos países, de Europa, América
Latina y Estados Unidos. Desde 2001, los casos de pedofilia cometidos en el
seno de la Iglesia fueron tratados de forma interna por la Congregación para la
Doctrina de la Fe, el equivalente de un ministerio de Justicia en el Vaticano.
El comité de la ONU se queja de que no ha recibido datos de todos los casos de
pedofilia estudiados por la Congregación, ni sobre los castigos resultantes.
Además criticó el recurso a “medidas disciplinarias que han permitido a la gran
mayoría de autores y a casi todos los que encubrieron abusos a niños escapar a
la justicia de los países donde se cometieron esos crímenes”. El comité ha
fustigado con especial virulencia el “código de silencio” impuesto al clero
bajo amenaza de excomunión.
Benedicto XVI, papa de 2005 a 2013, fue el primero en
disculparse por los abusos cometidos contra menores, y propugnó una política de
tolerancia cero, que según sus críticos no se ha visto acompañada de todas las
medidas apropiadas para eliminar el problema. Su sucesor, Francisco, dijo que
la pedofilia en el seno de la Iglesia es una “vergüenza”, y en diciembre creó
una comisión para investigar estos crímenes, prevenirlos y atender a las
víctimas. El comité de la ONU dio la bienvenida a la iniciativa, objetando no
obstante que ésta no va lo suficientemente lejos y que la Santa Sede debería
crear un organismo independiente de derechos humanos para ocuparse de la
cuestión. También dijo que los archivos de la Iglesia deberían abrirse para que
rindan cuentas los culpables de pedofilia y sus cómplices. AFP