Con
estas palabras, Jasón Collins, jugador de los Wizards de Washington, se ha
convertido este lunes en el primer deportista estadounidense de una de las
grandes ligas del país que revela su homosexualidad cuando todavía está en
activo. Collins firma su propio relato en una exclusiva de la revista
Sports Illustrated que saldrá a la venta el próximo 6 de mayo.
“No
había pensado en convertirme en el primer atleta homosexual de un gran equipo
estadounidense”, dice Collins. “Pero ya que lo soy, estoy encantado de abrir
esta conversación. Me hubiera gustado no ser el niño que levanta la mano en
clase y dice ‘soy diferente’. Si hubiera sido así, alguien habría hecho esto
antes. Pero nadie lo ha hecho, y esa es la razón por la que hoy levanto la
mano”.
La
confesión de Collins llega apenas dos semanas después de la de Brittney
Griner considerada como la mejor jugadora de la liga femenina, aunque
causó mucho menos revuelo. Ambos han revelado su homosexualidad en un momento
de intenso cambio de la opinión pública estadounidense a favor de los derechos
de gay y lesbianas, desde los ciudadanos hasta la esfera de la política.
“Su
anuncio constituye un momento importante para el deporte profesional y para la
historia de la comunidad gay”, declaró este lunes el ex presidente Bill
Clinton en un comunicado, en el que también revela que Collins estudió con su
hija Chelsea en la Universidad de Stamford. “También es la declaración de un
buen hombre que quiere lo mismo que muchos de nosotros: poder ser nosotros
mismos, hacer nuestro trabajo, crear una familia y contribuir a nuestra
comunidad”.
“Mi
doble vida me ha impedido tener cercanía con mis compañeros de equipo. Al
comienzo de mi carrera me esforcé por parecer heterosexual, pero según me
sentía más cómodo con esta máscara, cada vez me costaba menos”, explica Collins
en primera persona. “Estos últimos días, sin embargo, pocas cosas han separado
cuándo llevaba la máscara y cuándo no. Personalmente, no me gusta meterme en la
vida privada de otras personas y espero que los jugadores y entrenadores me
respeten”.
El
veterano jugador de la NBA escribe que nunca ha revelado su homosexualidad a un
compañero de equipo. La primera persona con quien lo compartió fue su tía. Ésta
le contestó que lo sabía "desde hace años". "Entonces me sentí
cómodo en mi propia piel y por primera vez, en su presencia, dejé de tener que
censurarme". Collins habla del "alivio" de aquella decisión.
"Imagínese que está en un horno. Algunos de nosotros aceptamos nuestra
sexualidad inmediatamente mientras que otros necesitan más tiempo para hacerse.
Yo tardé 33 años".
Una
de las primeras preguntas que debió responder Collins, que ha preparado su
relato con el periodista Franz Lidz, es por qué revelar su homosexualidad
ahora. El jugador dice haberse sentido inspirado por Joe Kennedy, político de
Massachusetts, y su compañero de habitación en la universidad. Kennedy acudió
el año pasado a la manifestación del Orgullo Gay en Boston. Collins no.
"De haber ido, hubiera respondido solo con medias verdades. Me sentí
orgulloso por él y avergonzado de ser un homosexual que ni siquiera podía
animar a mi amigo como espectador. Qué vergüenza tener que vivir una mentira en
una celebración de orgullo".
Collins
defiende su esfuerzo para “trabajar duro y ganar partidos” y pide a sus
compañeros que sean eso, buenos compañeros “dando apoyo pase lo que pase”. El
jugador reconoce que muchos le han preguntado cómo van a reaccionar otros
deportistas a este anuncio y que no tiene “ni idea”. “Espero lo mejor pero
estoy listo para lo peor”, escribe. “La mayor preocupación parece ser el comportamiento
poco profesional de jugadores homosexuales en el vestuario. Pero créanme. Me he
duchado muchas veces en estas 12 temporadas. Mi comportamiento nunca ha sido un
problema y no va a serlo ahora”.
De
momento, Kobe Bryant, líder de Los Ángeles Lakers, ya ha publicado en
Twitter lo "orgulloso" que se siente por el gesto de Collins.
"Nunca ahogues quién eres por la ignorancia de los demás", escribió
poco después de salir a la luz el artículo en la próxima portada de Sports
Illustrated.
El
deportista asegura que su conducta no va a cambiar, que sigue creyendo en la
premisa de que “lo que pasa en el vestuario se queda en el vestuario” y que
siempre será “un modelo de discreción”. “Soy un veterano, me he ganado el
derecho a ser escuchado. Lideraré con mi ejemplo para demostrar que los
jugadores gay no somos diferentes de los heterosexuales. No soy la persona que
habla más alto, pero siempre alzaré mi voz cuando otros se equivoquen”.
Clinton
insiste igualmente en su mensaje que para muchos homosexuales “esos objetivos
tan simples se siguen escapando”. “Espero que todo el mundo, especialmente los
compañeros de Jasón en la NBA, los medios de comunicación y sus muchos
seguidores le trasladen su apoyo y el respeto que se ha ganado”.